Aceite de oliva suave e intenso, ¿son virgen extra?

Aceite de oliva suave e intenso, ¿son virgen extra?

En las almazaras se obtienen tres tipos de aceites: virgen extra, virgen y lampante. Este último no es apto para el consumo humano y se lleva a refinerías para producir aceite de oliva, una mezcla entre el aceite lampante ya refinado y aceite de oliva virgen.

El aceite de oliva, también conocido como aceite de oliva suave o aceite de oliva intenso, es el aceite de oliva más consumido en España, país donde menos se valora las cualidades saludables de los aceites de oliva vírgenes.

Te lo contamos todo sobre el aceite de oliva suave y el aceite de oliva intenso, el aceite más consumido por los españoles.

¿Qué es el aceite suave e intenso que encontramos en el supermercado?

Según la Unión Europea, existen tres calidades comerciales de aceite de oliva:

  • Aceite de oliva virgen extra, de la máxima calidad. En esta categoría encontramos el aceite cosecha temprana.
  • Aceite de oliva virgen, de muy buena calidad, aunque con algún mínimo defecto.
  • Aceite de oliva, mezcla entre aceite de oliva refinado y aceite de oliva virgen.

Centrándonos en el aceite de oliva “a secas”, sin apellido, podemos decir que este se compone en un 80% como mínimo de aceite refinado y entre un 10 y un 20% de aceite de oliva virgen o virgen extra (normalmente, suele ser aceite de oliva virgen).

Tras someter a un aceite a un proceso de refinamiento, se pierden todas sus propiedades organolépticas y todas las cualidades iniciales de ese aceite. El resultado de ese proceso de refinado es una grasa vegetal insípida e incolora; por ello, se mezcla con aceites vírgenes, para poder dotar al aceite resultante de sabor, color y olor.

En los supermercados, encontramos aceite de oliva suave y aceite de oliva intenso. ¿En qué se diferencian estos dos? Básicamente, en el porcentaje de aceite de oliva suave que contengan en su composición. Si contiene más aceite de oliva virgen, estaremos ante un “aceite de oliva intenso”; si, por el contrario, su proporción de aceite de oliva virgen es menor, encontraremos “aceite de oliva suave”.

El problema radica en el consumidor. Encontrar etiquetados comerciales con estos apellidos solo confunde al destinatario final y, en muchas ocasiones, acaba en fraude en el sector oleícola. Lo que se consigue es igualar, de manera errónea, la calidad y las cualidades organolépticas de un aceite de oliva con un aceite de oliva virgen extra.

 

 

Sabor suave o intenso en los aceites vírgenes extra

El picor y amargor de un aceite de oliva son atributos positivos del mismo. Ambas cualidades proceden de diferentes polifenoles del aceite de oliva, compuestos antioxidantes muy saludables para nuestro organismo. El sabor amargo proviene de la Oleuropeína y el picor, del Oleocanthal.  

Sin embargo, la mayoría de los consumidores creen que el picor y amargor de un aceite son atributos negativos. Por ello, muchos productores de aceite etiquetan sus productos como aceite de oliva suave o aceite de oliva intenso.  

Un sabor más suave o más intenso en un aceite de oliva virgen extra, dependerá de las variedades de las aceitunas con las que se elabore el mismo. Si lo que buscamos es un aceite intenso en sabor y olor, es recomendable escoger un virgen extra de variedad picual, por ejemplo. Si, por el contrario, optamos por un sabor más suave, deberemos escoger aceites de variedad arbequina o empeltre.

Entonces, ¿cuál es la diferencia entre el aceite de oliva suave o intenso y el aceite de oliva virgen extra?

Diferencias entre los aceites suaves o intensos y los aceites vírgenes extra

Si tanto el aceite de oliva suave o intenso como los aceites vírgenes son aceites de oliva, ¿cuáles son sus diferencias? Existen tres principales diferencias entre estos tipos de aceites:

Proceso de elaboración

El aceite de oliva virgen y virgen extra se elaboran a través de procedimientos mecánicos. Las aceitunas llegan a la almazara antes de que pasen 24 horas desde su recogida, por lo que se encuentran en un estado óptimo. Una vez que llegan, se lleva a cabo la molturación y el batido de las mismas para elaborar un aceite de oliva de la máxima calidad.

En este proceso de elaboración, no intervienen procedimientos químicos. Todo el procedimiento se realiza con una temperatura constante inferior a 27ºC (extracción en frío) para asegurar la calidad de las aceitunas y, por tanto, del aceite de oliva resultante.

Sin embargo, el proceso de elaboración del aceite de oliva suave o intenso es completamente químico. Recordemos que el aceite de oliva “a secas” se elabora en dos pasos:

  • Aceite de oliva lampante. A pesar de que este aceite se elabore en las almazaras, es un aceite de pésima calidad. De hecho, no es apto para el consumo humano y por ello se traslada a refinerías. Gracias a este proceso químico, este aceite se puede consumir, pero no tiene guarda ninguna cualidad ni propiedad de los aceites de oliva vírgenes.
  • El siguiente paso para elaborar el aceite de oliva a secas es mezclarlo con un bajo porcentaje de aceite de oliva virgen, que es el que le otorgará sabor y olor.

Composición

Tanto los aceites vírgenes como los refinados están compuestos por grasas. La diferencia aquí radica en la calidad de las mismas. Ambos aceites tienen gran cantidad de ácidos grasos monoinsaturados, destacando ligeramente su proporción en los aceites refinados.

Teniendo en cuenta los otros grupos de lípidos, podemos decir que el aceite de oliva suave o intenso tiene menor proporción de ácidos grasos poliinsaturados, esenciales para el organismo; mientras que los aceites de oliva vírgenes presentan más Omega 3 y Omega 6 (grasas poliinsaturadas).

Otra diferencia que guardan respecto a su composición es el aporte de vitaminas de cada aceite de oliva. La vitamina con mayor contenido que ofrecen los aceites es la vitamina E, la cual apenas se encuentra en los aceites de oliva refinados.

Además de grasas y vitaminas, los aceites cuentan con más de 200 compuestos que resultan imprescindibles para nuestro organismo, como los antioxidantes, carotenos o minerales, entre otros, y que se encuentran, principalmente, en los aceites de oliva vírgenes.

 

Beneficios

Todas las categorías de aceite de oliva protegen ante episodios coronarios, debido al alto porcentaje de ácido oleico en su composición. Pero el resto de propiedades saludables (antioxidante, efectos frente a determinados cánceres, enfermedades cognitivas, efecto vasodilatador…) solo se pueden encontrar en los aceites de oliva vírgenes o vírgenes extra.

Por tanto, consumir cualquier tipo de aceite de oliva es beneficioso para la salud, pero siempre recomendamos consumir aceite de oliva virgen extra, ya que es un producto completamente natural, de la máxima calidad y el que más beneficios nos aporta.